El acto de inauguración contó con la presencia de la consejera Itziar Gómez.
El pasado viernes 4 de junio, Aislanat, empresa navarra que fabrica aislante ecológico de celulosa, inauguró sus nuevas instalaciones de 2.500 m² en Beriáin. Sus oficinas, diseñadas bajo el estándar Passivhaus, incluyen despachos de administración, laboratorio, sala de reuniones y aula de formación.
Gómez subrayó la importancia de la contribución de Aislanat en la consecución de la eficiencia energética
Iñigo Puncel, gerente de la compañía, dijo durante el acto que son un ejemplo de economía verde y circular y de bioindustria. Además afirmó que la innovación y la formación continua son las claves de su éxito. “Desde este aprendizaje, somos capaces de mirar al futuro con la ilusión de hacer bien las cosas en el presente”, aseguró Puncel.
Al acto acudieron, entre otros, Itziar Gómez, consejera de desarrollo rural y medio ambiente; Pilar Irigoyen, gerente de Sodena; José María Zabala, director general de Zabala Innovation; Josecho Vélaz, presidente del Colegio de Arquitectos de Navarra y Eduardo Domingo de Miguel, director de desarrollo de la Escuela de Arquitectura de la Universidad de Navarra.
La consejera Itziar Gómez comenzó su intervención felicitando a los artífices de proyecto, los hermanos Iñigo y Julen Puncel y resaltando que “en el proceso de transformación de papel de periódico reciclado procedente de Navarra en aislante ecológico de celulosa, van de la mano economía circular, eficiencia energética y proximidad.” Gómez subrayó la importancia de la contribución de Aislanat en la consecución de la eficiencia energética, clave en el tránsito haia una sociedad descarbonizada, tal y como recoge la estrategia Navarra Green en lo referido al ámbito de la edificación sostenible y eficiente. Como cierre concluyó que la compañía ejemplifica el compromiso socialmente sostenible y medioambiental.
La compañía navarra Aislanat transforma 2.000 toneladas de papel de periódico en celulosa cada año, con un crecimiento de entre un 10 y 12% anual. Es la única empresa del estado que transforma ejemplares de periódico en aislante de celulosa para todo tipo de edificios. El proceso de fabricación del aislante de celulosa consiste en desfibrar el papel del periódico reciclado, aplicarle un tratamiento de sales minerales contra el fuego y posteriormente ensacarlo. El aislante de celulosa se utiliza hace más de cien años en Estados Unidos y de cincuenta en Europa.
La celulosa es actualmente el aislante más eficiente del mercado por varias razones: tiene un desfase térmico de entre 8 y 12 horas según el espesor (esto es el tiempo que tarda en transmitir la temperatura de un lado a otro de su grosor); ahorra más del 50% en la factura de la luz o del gas; aumenta el confort térmico y acústico de la vivienda; su vida útil es la misma que la de la vivienda y no necesita mantenimiento.